Este domingo presentamos en Jaén el último libro de Ángel Rodríguez, Pequeñas canciones para un circo mudo (Piedra Papel Libros. Jaén: 2017), y hoy os adelantamos unos cuantos poemas de este bello poemario.
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El circo,
la vida.
El circo...
El circo soy yo.
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Cuando la vi muerta,
no parecía tan bajita.
Quizá nos alargue la muerte.
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Al trapecista le han cortado una pierna.
Mira la cuerda y tiende
su zapato en ella.
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Cuando acaba la función,
los abalorios de la mujer serpiente
caen bajo la cama
como la piel del fracaso.
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Si el amor cabe en estos cuerpos,
la esperanza también.
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Aguantar como azada olvidada al sol.
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